Una pequeña plaza mejorará el acceso a Cantarrana Eskola y al IES de Muskiz
La nueva entrada peatonal desde la calle Magdalena, en la que el Ayuntamiento invertirá más de 700.000 euros, permitirá salvar el desnivel que existe entre ambas instalaciones
El entorno de Cantarrana Eskola, así como de la colindante ampliación del IES de Muskiz, contarán con una nueva entrada peatonal y accesible a la altura de la calle Magdalena número 10. Se trata de buscar así una solución a la gran diferencia de cota que existe entre ambos equipamientos educativos. El nuevo acceso a los edificios es el resultado de pensar en ellos como un conjunto con necesidad de un acceso amplio y digno, aprovechando la construcción del nuevo edificio para el IES Muskiz BHI.
La actuación, en la que el Consistorio prevé invertir cerca de 700.000 euros + IVA, supondrá la creación de una pequeña plaza de esparcimiento en la que conjugarán los diferentes itinerarios propuestos para acceder al complejo: dos al campo de fútbol existente y uno al nuevo edificio de Enseñanza Secundaria y Bachillerato. El nuevo acceso consiste en la integración de escaleras y rampas con espacios ajardinados para suavizar la visión de la plaza como un espacio cerrado, salvando el pronunciado desnivel. Así, se podrá acceder tanto al nuevo edificio de Secundaria y Bachillerato como a la zona de recreo y edificio de Primaria e Infantil desde diferentes puntos de esta plaza.
Como entrada principal a esta plaza, el Ayuntamiento de Muskiz mantendrá el conjunto de arcos de piedra extraídos en el proyecto de demolición del antiguo edificio del IES Muskiz BHI. Su valor y su antigüedad han sido decisivos para mantenerlos en el nuevo proyecto, convirtiéndose así en un recordatorio de la historia del centro.
Desde el Consistorio esperan que el nuevo acceso pueda estar disponible para su uso hacia el mes de septiembre, aunque dependerá tanto de los propios trámites administrativos como de la climatología.
La parcela en la que va a actuar el Ayuntamiento de Muskiz y que se encuentra entre ambos edificios ya fue adquirida por el Consistorio por un valor de 400.000 euros. Tras el derribo de la vivienda que en ella había, el espacio, que no cuenta actualmente con ningún tipo de acceso, será urbanizado no sólo como zona de esparcimiento, sino como entrada accesible a los centros educativos.
